5 8 LECCIONES píos, porque esto sería inútil. Para evitar toda la menudencia y multitud de divisiones , que podría hacerse de los diferentes suelos, convengamos todavía segunda vez, y que sea para siempre , que llamamos verdadera tierra , la que no es arena; esto es, aquella cuyas partes son blandas, que con facilidad se unen, y que son grasas ; 6 de otro modo , que todas las partes de la tierra blandas , grasas y fáciles á unirse, son las que llamamos verdadera tierra, ó tierra vegetal, sea arcilla , olleros, toba, ó qual-quiera otra especie, aunque sea negra, parduzca , amarilla , roxa ó blanca , &c. Conformémonos sobre este principio, y llamemos á esto verdadera tierra. Pero para fixarte en el conocimiento y naturaleza de los diferentes suelos, y que no te embaraces en los diversos nombres , llamemos en general tierras fuertes á aquellas, en las quales la verdadera tierra domina en la arena, y que mojadas se pegan mucho a los pies, pues