DE AGRICULTURA.       239
»to, el ponerles la cal recien sacada del »horno; y asi conviene dexarla apagar; »pero se debe cuidar mucho de no de-»xarla tanto tiempo al ayre , porque to-»das las partes ígneas se evaporarían, y »la cal estando muy apagada, se redu-»ciría á polvo, y sería inútil.
    »En Suecia (i) se halla una piedra »de cal cerca del mar, de una calidad »excelente , y que necesariamente debe »contener muchos mas principios de fer-»tilidad, que todas las otras cales i es de »admirar, que los Suecos no la empleen »como mejoramiento, pues no sé que has-»ta ahora la hayan usado para abonar sus »tierras.
    »Hablo aquí de ella , porque no juz-»go difícil hallarla en muchas partes de »nuestra Península, donde hay tantas Cos* »tas y Puertos de mar: si la casualidad »se la proporcionáse al cultivador , me »atrevo á asegurarle su uso, aunque nun- 1
  (1) Cerca de Malmoe.